Sudáfrica compara las acciones de Israel en Gaza con el ‘apartheid’
«Está claro que la ocupación ilegal de Israel también se administra infringiendo el delito de ‘apartheid'», denunció.
Es indistinguible del colonialismo de los colonos.
El ‘apartheid’ de Israel debe terminar», manifestó el embajador.
Madonsela aseveró que tan solo «la ocupación» de las tierras palestinas «ha durado más de 50 años» y «se ha llevado a cabo desafiando el derecho internacional sin oposición de la comunidad internacional».
«Por lo tanto, debemos preguntarnos: ¿cuándo terminará la impunidad de décadas de Israel por violaciones generalizadas y sistemáticas de derechos y normas del derecho internacional, si no es ahora?», subrayó.
El diplomático hizo hincapié en que a lo largo de los últimos 106 días «el mundo ha observado con horror los implacables ataques» contra el pueblo palestino.
«La ferocidad de la violencia en la última campaña militar de Israel contra Gaza y su desacato del derecho internacional, incluida una orden de este tribunal del 26 de enero, es el indicio más claro de que Israel se considera desenfrenado en sus acciones contra los palestinos», afirmó.
De acuerdo con sus palabras, las fuerzas israelíes actúan «aún con más depravación y derramamiento de sangre» después de que la CIJ ordenara el mes pasado a Tel Aviv que tome todas las medidas posibles para prevenir el genocidio en Gaza, e instara al país a evitar y castigar casos que inciten directamente a cometer este crimen de lesa humanidad en el enclave palestino.
Además, la Corte exigió a Tel Aviv que permita la llegada de la ayuda humanitaria al territorio palestino.
En sus declaraciones, Madonsela instó a la comunidad internacional a «desarrollar mecanismos para respetar el derecho a la autodeterminación del pueblo palestino», así como solicitó la retirada del Ejército israelí de la Franja de Gaza debido a que sus acciones violan el derecho internacional.
Cabe recordar que el caso llegó a la Corte después de que la Asamblea General de la ONU votara por amplio margen en diciembre del 2022 para solicitar al organismo judicial una opinión consultiva no vinculante sobre la ocupación israelí.
Por su parte, Israel se opuso fuertemente a la solicitud y declaró que cualquier sentencia del tribunal sería «absolutamente ilegítima».