Delegaciones de unos 40 países asisten a la feria rusa PRODEXPO pese a sanciones de Occidente
Desde los años 90 Moscú organiza la feria internacional de alimentos y bebidas más grande de Rusia y Europa del Este.
Se trata de PRODEXPO, que este año recibió la confianza de 40 países de todo el mundo, y que refleja la situación actual de la economía rusa.
Hubo más de 2.150 estands en la feria de este año. Naciones de todas las regiones del mundo estuvieron presentes en esta feria, que duró cinco días.
De Asia, por ejemplo, participaron empresas de China, Irán y Corea del Sur, que este año ha vuelto a participar en la exposición.
«Nos complace que la República de Corea haya regresado a nuestra feria con su pabellón.
Además, continúan participando aquellos países que lo hacen a nivel nacional.
Las exposiciones más grandes son las de Turquía y China», declaró Serguéi Voronin, subdirector de relaciones con expositores extranjeros.
La participación de los países asiáticos en el comercio exterior ruso ha crecido hasta casi el 70 % y sigue creciendo. China y la India aumentaron de forma muy significativa el volumen comercial con Rusia.
Rusia y América Latina aumentan el intercambio comercial
Además, también ha habido presencia de países latinoamericanos.
Por ejemplo, ha estado presente una empresa chilena que comercializa bebidas alcohólicas y frutas de varios países que empezó a aumentar sus ventas en Rusia considerablemente en 2015 y que, en estos últimos años, ha crecido aún más.
«Me recuerda el inicio de los años 2000, cuando Chile tuvo un ‘boom’ del vino aquí en Rusia. Parece que está pasando absolutamente lo mismo», declaró Andrés Kúznar, director comercial de BDP Foods.
Según el presidente ruso, Vladímir Putin, en los últimos cinco años el intercambio comercial entre Rusia y América Latina aumentó un 25 %, en parte debido a que muchas empresas europeas se vieron forzadas a dejar el mercado ruso debido a las sanciones impuestas por Occidente.
Este año, en PRODEXPO estuvieron presentes también productos de Brasil y de Colombia. Argentina, por su parte, trajo sus vinos.
«En los últimos dos años venimos incrementando nuestras exportaciones de vino fraccionado, y si podemos concretar lo que estamos viendo de estos días de la feria, te puedo garantizar que va a ser el mejor año de nuestra bodega para el mercado ruso», dijo, a su vez, Adrián Vollmer, encargado del área de exportación de familia Falasco.
Tanto chilenos como argentinos aprovechan el espacio que dejaron los europeos, que después de ostentar el 50 % o más de la participación en el mercado ruso, hoy por hoy se tienen que conformar solo con el 16 %.
De todas formas, este año hubo representantes italianos, portugueses, bielorrusos y españoles en la feria, como Álvaro Morte Ródenas, encargado del área de exportación de aceites Albert, que viene participando desde hace más de 10 años.
«Nosotros, antes de que empezara toda esta situación, éramos la cuarta o quinta empresa que más enviaba aceite de oliva a Rusia del mundo.
Y en estos momentos nuestras exportaciones han caído. No solo las nuestras, las globales.
España es el primer productor mundial de aceite de oliva, por lo que lo que pasa en España se puede un poco extrapolar a la situación general, y han bajado alrededor de un 30 % y un 40 %», afirmó.
Con respecto al Viejo Continente, vale destacar el caso de Serbia, que es el único país europeo que tuvo representación nacional.
El resto solo tuvo participaciones a nivel privado.
Muchos expositores manifiestan que quieren seguir comerciando con Rusia, más allá de lo que digan los políticos que los representan.