La Policía del Capitolio de EE.UU. anunció este jueves que ha cerrado la investigación sobre el video pornográfico gay grabado en una sala de audiencias del Senado sin presentar cargos. La institución señaló que tras haber consultado con los fiscales y haber llevado a cabo una investigación «exhaustiva», así como «una revisión de los posibles cargos», se determinó que «pese a una probable violación de la política del Congreso, actualmente no hay pruebas de que se haya cometido un delito», recoge NBC News.
En este sentido, el comunicado al respecto detalla que, si bien la sala de audiencias «no estaba abierta al público» cuando se realizó el video la mañana del pasado 13 de diciembre, «el miembro del personal del Congreso implicado tenía acceso» a ella.
Las autoridades también indicaron que los dos hombres que se grabaron manteniendo relaciones sexuales «no cooperaron» en la investigación.
«El empleado del Congreso, que desde entonces ha renunciado, ejerció su derecho a guardar silencio en virtud de la Quinta Enmienda y se negó a hablar con nosotros», dijo la Policía, destacando su disposición a «revisar nuevas pruebas si alguna sale a la luz».
La grabación explícita fue difundida por The Daily Caller. Además de ese video, que inicialmente fue publicado en un grupo privado para homosexuales en la esfera política, el medio divulgó una fotografía en la que se ve al empleado del Congreso desnudo sobre una mesa a la que suelen sentarse los senadores para hacer preguntas durante las audiencias.
Aunque la identidad del empleado no ha sido confirmada, la prensa reportó que se trata de Aidan Maese-Czeropski, miembro del personal del senador demócrata Ben Cardin, quien se mostró «indignado y decepcionado» por el hecho, al que calificó como un «abuso de confianza».
Otro implicado, según medios alemanes, es un exempleado del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales del país europeo.